domingo, 8 de abril de 2012

Por Pascua ¡a comerse la "mona"!


¿Queréis saber como pasaban nuestros abuelitos la pascua?, estamos encantados de compartir con vosotros estos recuerdos tan entrañables.



Enriqueta cuenta que ella de jovencita iba a La Fuente del Molino (Finestrat) a comerse la mona de Pascua. Dependiendo de lo que les apeteciera pasaban el día entero o sólo la tarde; después siempre se iban a bailar.

Laura se iba a Elda, al chalet que tenían sus tíos allí. Pasaban 3 o 4 días, dependiendo del tiempo o de las ganas que tuvieran, y solían coger almendra, tomates. Comían y merendaban en la pérgola de la entrada.

Federico, como vivía en el campo, solía quedarse en casa a celebrar la pascua; en ocasiones iba al cortijo de su tía. Tenían sus tradiciones, pues el Jueves Santo comían potaje y arroz con leche; el Viernes Santo hacían castañas asadas; y el domingo tomaban la mona.

Nieves siendo pequeña iba al monte con toda la familia. Los niños jugaban y los mayores se juntaban para hablar, bailar? Algo típico que solían comer era conejo frito con tomate y tortilla de patatas.

María D. iba al Castillo de San Fernando o al de Sta. Bárbara, según les apeteciera; esto lo hacía con su marido e hijos. De soltera solía ir al chalet de una amiga, donde bailaban, contaban cosas, merendaban y, para terminar la jornada, iban al cine.

Josefina recuerda cuando estaba en Marruecos, allí iban al bosque a pasar el día y hacían paella de carne para comer. Nos dice que había mucha gente en esa época.

María R. cuenta que cuando ella vivía en Barcelona no se celebraba la Pascua como aquí, que se quedaban en casa y se comían la mona allí.

Gloria también lo celebraba en casa, pues en Zaragoza la tradición es diferente. Lo que sí que coincide es que se juntaba toda la familia.

Nieves, María D. y Laura nos cuentan que cuando eran pequeñas la tradición en Pascua consistía en vestir a las niñas con la bata de percal, un delantal y unas zapatillas con una lazada de color rojo o negro.



martes, 3 de abril de 2012

Las torrijas de los abuelos


Como buenos y buenas cocineros/as que son, nuestros abuelitos nos proponen unas cuantas recetas de productos típicos de la semana santa y la pascua. ¿Alguien se atreve a probar…?

v Buñuelos de calabaza:

¥ Ingredientes:
-        1kg de calabaza
-        1kg y ½  de harina
-        6 huevos
-        1 limón rallado
-        Levadura de panadería
-        Azúcar
-        2 l. de aceite

¥  Preparación:

      Se trocea la calabaza y se pone a hervir con agua. Una vez que está blandita se machaca y la guardamos hasta que esté templada para  poderla amasar bien.

        Mezclamos la harina y la levadura con la ayuda de un colador. Se junta la masa de calabaza con la harina, el azúcar, los huevos y el limón rallado; se mezcla todo muy bien para que quede homogéneo.

       Ponemos en una sartén el aceite y echamos la corteza del limón para saber cuando está caliente el aceite.

      Con la ayuda de una cuchara vamos echando la masa en una buñolera ya caliente; la metemos en la sartén y los vamos sacando conforme los vamos viendo doraditos.

     Antes de comer hay que dejarlos enfriar en una fuente con papel de cocina, que absorbe el aceite. Se pueden comer acompañados de azúcar.

(María D. y Cristina)

           Se debe decir que los buñuelos pueden ser también de viento, arroz o manzana, eso ya va al gusto de cada uno y a la tradición familiar. Y, además de comérselos solos, podemos acompañarlos de una buena taza de chocolate caliente.
Uuuummm, ¡qué ricos!

v Torrijas:

¥ Ingredientes:
-        1l de leche
-        Azúcar
-        Canela en rama y en polvo
-        Huevos
-        Pan del día anterior
-        Aceite

¥  Preparación:

Se pone la leche a calentar con una ramita de canela hasta que hierva un rato; mientras tanto vamos cortando el pan en rebanadas.Retiramos la leche del fuego y la dejamos enfriar. Una vez que está templada vamos mojando el pan en la leche.

        Ponemos el aceite a calentar en una sartén. Pasamos el pan por el huevo batido y echamos las rebanadas en el aceite bien caliente.

       Cuando están doraditas las torrijas las sacamos del fuego y las ponemos en una fuente con papel absorbente; les echamos azúcar y canela en polvo.

         Una vez frías ya están listas para comer.

(María D., Rosario B. y Mario)


¡FELICES VACACIONES!


¡y no os olvidéis de visitar a vuestros abuelos!